Neurocirugía Vascular
La neurocirugía vascular es la parte de la neurocirugía que trata aquellas lesiones que han provocado o pueden provocar hemorragias o infartos en el cerebro o la médula espinal.
Es una subespecialidad muy compleja, debido a los altos requerimientos técnicos que precisa, su relativamente escasa frecuencia y a las consecuencias que estas lesiones pueden tener sobre la vida y la función del paciente.
En general se encarga del abordaje de:
Aneurismas arteriales Malformaciones vasculares Fístulas arteriovenosas durales Infarto cerebral (EVC)
También trata los cavernomas, que están a medio camino entre las lesiones vasculares y las tumorales, y algunas enfermedades que pueden provocar infartos cerebrales, como la enfermedad de Moya-Moya.
Resumiendo de manera breve su campo de acción, veremos cada una de estas lesiones:
Aneurismas Cerebrales: son dilataciones arteriales secundarias al debilitamiento de la pared del vaso que aparecen en las bifurcaciones de las arterias cerebrales. Pueden ser diagnosticados por casualidad en el transcurso de un estudio por otra causa o ser sintomáticos.
Cuando son sintomáticos deben tratarse, ya sea mediante microcirugía o mediante tratamiento endovascular. El fin que se persigue es excluir el aneurisma totalmente de la circulación. Respecto a los asintomáticos, se asume que deben ser tratados, debido al riesgo de rotura, aquellos que han demostrado crecimiento o que son irregulares. Es imprescindible que sea evaluado por un neurocirujano con amplia experiencia.
Malformaciones Arteriovenosas la mayoría se diagnostican tras haber sangrado. En estos casos es fundamental que el paciente acuda a un centro o neurocirujano con mucha experiencia, ya que la cirugía de las malformaciones cerebrales y espinales es posiblemente la más complicada entre las operaciones realizadas en neurocirugía. Dependiendo de cómo es la malformación, su localización y tamaño, y de la edad del paciente se debe escoger el mejor tratamiento. Fístulas Arteriovenosas Durales dependiendo la localización (craneal/ espinal) se puede realizar un tratamiento quirúrgico o endovascular. Cavernomas, de tener que ser tratados, el tratamiento de elección es quirúrgico, si bien en cada caso hay que individualizar la necesidad de tratamiento.
Neurocirugía Endovascular
En NEUROCARE contamos con el concepto de Neurocirugía vascular Hibrida “HYBRID NEUROSURGERY” que combina tanto la cirugía microvascular como la Neurocirugía endovascular la cual es una técnica de Mínima Invasión.
La Terapia endovascular neurológica permite realizar procedimientos diagnósticos y terapéuticos, mediante técnicas y accesos mínimamente invasivos, guiados por imágenes radiológicas de alta resolución.
Permite tratamiento en pacientes debidamente seleccionados de Aneurismas Cerebrales, Malformaciones Arteriovenosas, Fistulas durales, Estenosis intra y extra craneales, y el tratamiento del infarto cerebral en fase aguda; sin la necesidad de recurrir a las técnicas quirúrgicas tradicionales invasivas, permitiendo una recuperación con un menor tiempo de estancia hospitalaria.